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Visitar el Castillo de Oropesa del Mar es vivir la historia en primera persona, desde el poder de los musulmanes en la zona hasta el Cid o el Rey Jaume I.

Oropesa del Mar es un pequeño pueblo a orillas del Mediterráneo, ubicado en la provincia de Castellón. Visitar su casco histórico es descubrir parte del patrimonio histórico y cultural de este destino. Pasear por sus calles te llevará hasta los restos del Castillo, resquicios de una antigua fortaleza musulmana.

El Castillo de Oropesa del Mar se asienta sobre lo alto del casco antiguo de la villa, un enclave estratégico desde donde se puede contemplar la inmensidad del mar y la tierra. Solo tienes que situarte en la parte más alta para disfrutar de una gran visión panorámica de la zona.

Además, se pueden ver los campos de naranjos que hay entre Marina D’or y Oropesa del Mar, la capilla de la Virgen de la Paciencia, los enormes bloques de viviendas en los acantilados de la costa, las playas y las montañas cercanas.

Por lo que respecta a su arquitectura, originalmente, la planta de este castillo era poligonal regular, con seis torres abiertas en abanico, y una potente torre mayor de planta trapezoidal. En la actualidad, tan solo queda la estructura musulmana de la muralla con sus cuatro torres.

Las ruinas que podemos contemplar durante nuestra visita al castillo son el resultado de un plan de recuperación y excavaciones arqueológicas de Oropesa del Mar, con el que se ha desenterrado parte de la estructura primaria de origen musulmán y se ha descubierto que, en la zona, ya hubo asentamientos desde la edad de bronce. Con las excavaciones arqueológicas se han recuperado algunas estancias del castillo y, en algunos lugares, se puede ver el suelo original.

El Castillo de Oropesa del Mar esconde mucha historia entre sus ruinas. Fue el Cid quien le arrebató la fortaleza musulmana al rey Alhagib en 1090 y, desde entonces, pasó a control cristiano y fue muy importante estratégicamente debido a su ubicación. Más tarde, el Castillo estuvo bajo el poder de Jaume I (1233).

Disfrutar de Oropesa del Mar es hacerlo de sus playas, sus montañas y de toda la historia y cultura que rodean su casco antiguo.