Las mejores vías ferratas de la provincia de Alicante
Las mejores vías ferratas de la provincia de Alicante
Es la aventura llevada casi al límite. Por allí donde el itinerario se hace duro y angosto, aparecen las vías ferratas para facilitar el camino entre paredes rocosas. A medio camino entre el senderismo de montaña y la escalada surge la opción de paso por las vías ferratas. Y en la provincia de Alicante existen unas cuantas interesantes para que el viajero pueda disfrutar de la experiencia.
Pueblos del interior de Alicante como Petrer, Polop, Relleu, Villena o Castalla presumen de contar con las vías ferratas más destacadas de la provincia. Caminos horizontales y verticales equipados con materiales como presas, pasamanos, cadenas o tirolinas que permiten asegurar la integridad del aventurero. Una actividad que exige una adecuada forma física.
El Xorret de Catí, en Castalla, Ponoch o El Cid son algunas de las vías ferratas que cuentan con más adeptos en la provincia. La primera es ligeramente desplomada en su primera parte y está muy bien equipada. Repleta de agarres donde poder asirse con total seguridad, resulta recomendable como complemento a otras excursiones que se pueden realizar por la zona.
Algunas producen vértigo
Sobre todo vertical, el recorrido de la vía ferrata del Ponoch, en Polop, se presenta al viajero compuesto de cables y grapas bien dispuestas a lo largo de todo el recorrido. No apta para los que padecen de vértigo. Hay que poner atención a los rápeles. Existen dos de 25 y 35 metros, por lo que se recomienda llevar una cuerda de amplia longitud para bajar con firmeza.
La Sierra del Cid, cerca de Petrer, es más exigente. Sobre todo porque existen tramos donde solo hay un cable de seguridad que vela por nuestra integridad y se debe hacer la escalada con manos y pies sobre la roca. El material que se disemina por este recorrido es el justo y se recomienda no agarrarse a las plantas porque no resultan muy seguras.

