Descubre el patrimonio que se esconde detrás de la muralla en el yacimiento arqueológico del Puig de la Nao.

En Benicarló encontramos uno de los yacimientos ibéricos más importantes de la Comunitat Valenciana, el Puig de la Nao. Visitar este yacimiento nos permite descubrir un poblado íbero construido a mediados del siglo V a.C y excepcionalmente conservado. En él se han descubierto interesantes cerámicas áticas, entre las que destaca el kylyx atribuido al pintor Penthesilea.

El planteamiento urbanístico del Puig de la Nao, el trazado de sus calles, los diferentes edificios donde descansaban, trabajaban o practicaban el culto los íberos y el paseo por las murallas nos permiten conocer de cerca la época y el estilo de vida de los íberos.

En cuanto a su arquitectura, la construcción de las casas se realizó con mampostería, aprovechando las piedras del entorno. Lo más destacable del Puig de la Nao es la presencia de casas con dos alturas, las cuales estarían unidas por escaleras de mampostería o de madera, o con un acceso a la parte superior aprovechando los desniveles del terreno.

El asentamiento se construyó marcando, en primer lugar, el perímetro con la muralla y, una vez definido, se trazaron los principales ejes viarios. Esta distribución de las calles nos habla de un urbanismo planificado con un planteamiento previo para buscar la racionalización del espacio.

Puedes acceder al poblado y descubrir toda su historia y patrimonio concertando una visita guiada con el Museo de la Ciudad de Benicarló.

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