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Un espectáculo natural digno de visitar te espera en la Cueva Turche. Un espacio para sentir la naturaleza, refrescarte con un baño o disfrutar de un picnic.

Sentir la naturaleza en su máximo esplendor es sinónimo de un día en la Cueva Turche. Una parada obligatoria en tu visita a Buñol.

Un gran anfiteatro de roca caliza y un lago a sus pies conforman el conjunto geológico de este paisaje. En épocas de lluvia, se puede observar una gran cascada de unos 60 metros de altura, que aporta una belleza inigualable al lugar. Gracias a su fácil acceso, podrás disfrutar de un agradable paseo mientras observas el paisaje y suena de fondo el canto de los pájaros.

Si decides realizar el recorrido, dispones de un merendero acondicionado para un picnic en plena naturaleza con vistas a la cascada. Durante el periodo estival, el lago tiene acceso a un refrescante baño para todo aquel que lo desee. ¡Atrévete a ser uno de ellos!

En Buñol puedes disfrutar del entorno y vivir un espectáculo natural con solo adentrarte en este espacio. Respirar aire puro, relajarse divisando el paisaje, pasarlo en grande con una comida en el campo y mucho más es lo que te espera en tu visita a la Cueva Turche de Buñol.

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