Imprescindibles
Si te decantas por el interior para conocer su historia y su insólito paisaje, lugares como Bocairent, Requena, Morella, Sant Mateu, Biar, el Castell de Guadalest son algunos de los municipios que no querrás perderte. Y para descubrir la pura esencia mediterránea, un paseo por las calles de Jávea, Peñíscola o Gandia, entre otros, será una auténtica delicia. ¡Un día de sol y playa en un entorno único!
Además, la gastronomía tradicional y casera de cada una de las localidades pondrá el broche de oro a tu estancia. No puedes decir que nos has visitado sin probar la paella hecha a leña o algún arroz elaborado con los ingredientes tradicionales. ¡Una experiencia que tu paladar jamás olvidará!
Fiestas Imprescindibles
Monumentos Imprescindibles
El Castillo de Todolella, en Castellón, es uno de los emblemas de este municipio, ¡no puedes dejar de acercarte a verlo! Se trata de una construcción destinada a la defensa y a ser vivienda señorial, construida en el siglo XVI. En cuanto a su configuración, el Castillo de Todolella sitúa cuatro cuerpos alrededor de un patio central, en los que se van repartiendo distintos tipos de estancias.
Los muros del Castillo de Todolella aún conservan sus almenas gracias a una restauración reciente, y está construido con mampostería. En la actualidad se encuentra habitado y es de titularidad privada, pero se puede visitar a través de una cita concertada.
Te invitamos a descubrir Todolella y su Castillo en una visita en la que además conocer el extenso patrimonio histórico de esta localidad de la comarca de Els Ports. Te van a sorprender sus puentes, sus ermitas, o la aldea abandonada de Sarañana, un lugar en el que hacer fotografías increíbles. El Núcleo Histórico Tradicional de Todolella, un municipio del que ya se tiene referencias en el siglo IX, te permitirá viajar en el tiempo, ¡al igual que su castillo! No te puedes perder este rincón lleno de historia de nuestro territorio ni sus tradiciones.
La ermita fundada a principios del siglo XVII como Capilla o Ermita del Hospital Municipal anexo a ella y, hoy día, desaparecido. Como casi todas las construcciones barrocas de principios del siglo XVII, es sencilla de líneas y de materiales. El Camarín es uno de los espacios que ha conservado distintos elementos singulares como son la azulejería valenciana del pavimento del siglo XVIII.
El Castillo de la Costurera o Castillo de Seta es una fortaleza de origen musulmán con posteriores reformas cristianas, construida sobre el cerro que le da su nombre, a una altura de 750 m.
Se trata de una fortaleza de planta irregular adaptada a la topografía, de la que quedan algunos restos de muralla construida con tapial y mampostería.
Entre los restos existentes destacan dos torres situadas al norte, una cúbica de origen árabe y una semicilíndrica adosada a la muralla de origen cristiano.
Iglesia de estilo románico data del siglo XVI, siendo una de las más antiguas de Alicante. La iglesia fue construida antes de 1596, en dos o tres fases distintas, e intervinieron varios arquitectos. Es de planta rectangular, con capillas laterales entre los contrafuerte, destaca su torre de planta cuadrada.
Construida en 1732 y ampliada en 1822, es de estilo barroco. Está dedicada a su patrono, San José.
Banyeres de Mariola presume de un bagaje industrial muy rico y variado. El recorrido del río Vinalopó por su término municipal está rodeado de construcciones muy características, como son los batanes, molinos harineros y molinos papeleros. Estas construcciones fueron el símbolo de una época y, ahora, nos ayudan a entender cómo era la industria entonces.
Para descubrir estas construcciones y conocer su historia, Banyeres de Mariola cuenta con la Ruta de los Molinos. Un recorrido que une los tres molinos papeleros más emblemáticos, a pesar de que, históricamente, estuvieron activos nueve entre los siglos XVIII y XX. En estas construcciones trabajaron la mayor parte de los vecinos de Banyeres de Mariola.
El itinerario por estos monumentos transcurre a lo largo del río Vinalopó, lo que te permite disfrutar de un agradable paseo por un lugar privilegiado. Podrás contemplar la flora y fauna de un paisaje que apenas ha sufrido variaciones.
La Ruta de los Molinos empieza en el Molí d l’Ombría, un molino harinero del cual, actualmente, todavía se conservan las muelas en el sótano. La ruta continúa hasta el Molí Pont, la futura sede del Museu Valencià del Paper.
El entorno en el que se encuentran los molinos ha determinado las características y, por eso, a lo largo de la ruta, puedes encontrar información sobre plantas que se utilizaban para la confección de tintes.
Descubre este entorno privilegiado y conoce más acerca de la historia de Banyeres de Mariola.
La ermita de San Sebastián se encuentra situada en el antiguo barrio de Las Peñas. Al parecer la ermita se levantó a finales del siglo XIV cuando se emprendió una rigurosa campaña de bautismo para tratar de convertir a la población morisca que residía en el Barrio de Las Peñas. La Ermita de San Sebastián es un edificio de estilo clásico popular, con cubiertas a dos aguas. La portada es clásica con ventanal ovalado y puerta claveteada. El interior, de traza sencilla, consta de tres naves cubiertas con un artesonado mudéjar sustentado por pilares octogonales de estilo gótico. Por la parte derecha del templo se accede a la Capilla de Comunión, un camarín cubierto con una cúpula que fue construida en 1748.
El Convento de San Francisco, construido en 1617, se encuentra ubicado en el paraje del Barrio de La Loma. Funcionó como convento hasta 1835 pero también fue utilizado como fuerte defensivo, durante la Guerra de Sucesión, como fuerte avanzado, en la defensa de Requena en la guerra contra los franceses, y como hospital de pobres. En el conjunto de la edificación del convento destaca la iglesia de estilo barroco, la torre campanario y el claustro de estilo tardo-renacentista.
En la plaza principal se encuentra la emblemática fuente que da nombre al nuestro pueblo. Conocida popularmente como Els Xorros, que junto al escudo del año 1826 que preside dicha fuente, son un recuerdo del pasado. Esta fuente y otras más pequeñas abastecían de agua a la población. Entre los años 1911-1929, se realizó un pozo en la plaça de l'Església y con una noria se sacaba la agua, para que la gente que residía en la parte alta de la población se pudiere abastecer de agua sin tener que bajar hasta la plaza.
En los años 1949-1950 la plaza fue objeto de reformas y la antigua fuente fue destruida, y se construyó otra con forma octogonal con piedras de mármol en la misma plaza, ante el actual número 9 de la plaça Francesc Carròs.
En el año 1950 como consecuencia de la urbanización de las calles, la fuente y el que se usaba como lavador y abrevadero público, fueron trasladados, y se construyó la nueva fuente con la debida conducción de aguas.
El Ayuntamiento, de nuevo, reestructuró la plaza el año 1971. El proyecto contaba con la pavimentación y urbanización de la plaça Francesc Carròs y el traslado de la fuente pública a su lugar actual para que nuestra histórica fuente, que le dio el nombre a esta villa, la Font d'en Carròs, sea también un lugar emblemático de nuestro pueblo.
Las figuras y los cañones son originales de las antiguas fuentes.
Fuerte del siglo XIX, hoy en estado de ruina, construido durante las guerras carlistas y situado en un altiplano en la carretera de acceso al castillo. Está formado por recintos cuadrangulares con torreones semicirculares unidos por un tramo con lienzos con aspilleras para fusilería.
Desde aquí arriba se disfruta de una espléndida perspectiva sobre la trabajada llanura del valle fluvial y también los primeros pliegos de la Cordillera Ibérica. Por este motivo se ha denominado este mirador el Balcón del Júcar, ya que divisa toda La Ribera. Al lugar se puede acceder a través de una senda que parte del Castillo o bien por carretera.
¡Buenas vistas aseguradas!