Ruta de los Miradores de Jávea: vistas únicas al Mediterráneo

La Ruta de los Miradores de Jávea, en Alicante, te permite descubrir lugares donde el mar y la montaña se encuentran en perfecta armonía. Desde acantilados imponentes hasta calas escondidas, cada punto de observación ofrece una panorámica única que combina historia, naturaleza y encanto. 

Prepárate para dejarte sorprender por vistas que van desde el Cap de Sant Antoni hasta el Cap de la Nau, y descubre rincones de La Marina Alta que harán que quieras quedarte allí para siempre.

Jávea y su Ruta de los Miradores

Esta ruta de los 15 miradores de Jávea puede comenzar por el Cap de Sant Antoni, a 161 metros de altura y junto al faro. Se ve toda la bahía y las montañas de Alicante, incluso la Sierra de Aitana en días despejados. A pocos pasos, el mirador conocido como els Molins ofrece otra perspectiva del Montgó y de todo el municipio, con los molinos antiguos como testigos del pasado.

A ras de mar se encuentran los de la Punta de l’Arenal y la Séquia de la Nòria, que permiten disfrutar de panorámicas sobre la playa, antiguas piscifactorías romanas y salinas. Las pequeñas calas como Cala Blanca o Caletes revelan la belleza del litoral más salvaje, con acantilados que caen al Mediterráneo y vistas continuas del Cap de Sant Antoni. ¡Recuerda que puedes hacer la Ruta de los Miradores de Jávea en coche o dividirla en tramos para recorrerla en varios días!

Más hacia el sur, la Creu del Portitxol y el Mirador de l’Illa conectan con la historia y arqueología de la zona, mientras que la Falzia y el Cap Negre muestran Jávea en toda su grandeza, desde el norte al sur del litoral. El Cap de la Nau, el punto más oriental de la Comunitat Valenciana, regala algunas de las panorámicas más espectaculares de la Ruta de los Miradores de Jávea.

Los de Les Pesqueres y Ambolo evocan la tradición pesquera y la vigilancia costera del siglo XVI, con vistas sobre el litoral más salvaje. Y, finalmente, el Castell de la Granadella y el Parque Forestal de la Granadella ofrecen panorámicas sobre pequeñas bahías y zonas montañosas, perfectas para cerrar la ruta con un recuerdo imborrable de Jávea.

Cada mirador de esta ruta une el encanto del mar y la montaña, te permite respirar aire fresco y te invita a caminar sin prisa y dejarte sorprender por la magia del Mediterráneo. ¡Prepara la cámara y enamórate de estas vistas únicas!

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