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Oliva tiene un buen número de atractivos que la convierten en un gran destino, ¡súmale una visita a este interesante museo arqueológico!

El Museo Arqueológico de Oliva está alojado en un edificio señorial originario del siglo XV, así que solo por su ubicación ya merece la pena la visita. Si además nos centramos en sus exposiciones, encontraremos muchos motivos para pasar un buen rato contemplando y aprendiendo. La historia de Oliva y de la Safor nos resultará mucho más fácil de entender tras esta visita, en la que podremos disfrutar de piezas y herramientas cotidianas desde la Prehistoria pasando por diferentes épocas y culturas como la ibérica o romana. Obviamente la Edad Media y el periodo islámico también serán objeto de estudio y muestra.

Si avanzamos en el tiempo, el Museo Arqueológico de Oliva se detendrá en el periodo del siglo XVI y nos dará una buena muestra de cómo era la ciudad en esa época y muy especialmente se centrará en el Palacio Condal de Oliva, del que conserva muestras muy interesantes.

Si buscas más que hacer en Oliva, te aconsejamos en cualquier época del año dar un paseo en sus playas o bañarte si el tiempo es el adecuado, disfrutando con respeto del ecosistema que albergan sus dunas. Además puedes complementar tu visita cultural al Museo Arqueológico de Oliva con un recorrido en plena naturaleza, visitando el Parque Natural de la Marjal de Pego-Oliva y admirando su valor paisajístico y la biodiversidad que acoje. Para terminar, nuestra sugerencia es que recorras su casco urbano, acercándote al antiguo Raval morisco y dejándote sorprender por las increíbles vistas que podrás disfrutar desde el Tosalet del Doix.